Una nueva meta tenemos en el horizonte y es el GFNY Cozumel, pero antes de enfrentarnos a los 160K decidimos participar en el Gran Giro Guadalajara. Así podríamos ver las distintas sensaciones y tomar un poco de experiencia. Este sería nuestro punto de partida, para revisar los entrenamientos y apretar el paso a fin de llegar en plena forma a Cozumel.
El Gran Giro Guadalajara es una carrera que consta de 140Km, dividida en 2 vueltas de 70Km alrededor de la bella perla tapatía, a su vez el recorrido se divide en secciones, la primera con velocidad promedio regulada a 30Km/h y de 45 kilómetros de longitud. Los 25 kilómetros restantes son en modalidad competencia, con lo que se permite rodar tan rápido como puedas.
La salida estaba marcada para las 8hrs del 7 de mayo en la glorieta de la Minerva. Llegué con muy buena anticipación a la meta, quería estar bien preparado. Para mi mala fortuna la noche previa no logré descansar lo suficiente, la emoción de la carrera y las ganas de estar ya pedaleando me lo impidieron.
Arrancamos
Ya estando en la zona de meta me coloqué lo más adelante como me fue posible, alrededor de las 7:45 hrs me encontraba en posición para la salida, se sentía una vibra de emoción en todos los participantes. A las 8hrs en punto nos dieron el banderazo de salida. Arrancamos con un grito de júbilo y a pedalear, poco a poco fui calentando y mejorando mi cadencia. Los primeros kilómetros fueron sumamente lentos.
Íbamos aproximadamente a un promedio de 20 Km/h, incluso escuché a algunas personas quejarse por la forma en que iban controlando al pelotón. Al entrar al paso a desnivel que va por debajo de la catedral metropolitana de Guadalajara presencié el primer incidente, el túnel estaba sumamente oscuro y una persona terminó cayéndose, logré ver que era un joven.
Poco a poco el pelotón comenzó a tomar una mejor velocidad, muy cercana a los 30Km/h. Aproximadamente a la altura del kilómetro 21 fue cuando tomamos López Mateos Nte, de aquí seguiríamos en dirección de Nte a Sur hasta entroncar en Manuel Gómez Morín Sur (Periférico Sur), este tramo estuvo lleno de pasos a desnivel, algunos bien iluminados, otros medianamente iluminados y con una cantidad innumerable de caimanes (bocas de tormenta) que me hacían recordar la caída que hace poco más de un mes sufrió mi esposa.
Caída frente a las Fuentes
El pelotón iba sumamente compacto al llegar al entronque con Periférico Sur, y para tomarlo tendríamos que bajar de los carriles centrales a los laterales. Esto provocó algo similar a un embudo y que se bajara la velocidad drásticamente. Lamentablemente una persona que iba adelante de mi, no se percató de que iban frenando lo que ocasionó que chocara contra el ciclista de su izquierda, el golpe lo sacó de balance y terminó cayéndose. Para mala suerte del que iba a su derecha ambos terminaron en el suelo. Fue realmente afortunado evitar la caída al estar exactamente atrás del incidente.
El tramo de periférico fue mayormente de ascenso, desde López Mateos hasta Cd. Granja es un ascenso continúo, a pesar de ello tuve la sensación de que fue muy rápido. En Ciudad Judicial tomamos la lateral para más adelante llegar a la avenida Vallarta. A pesar de que esta zona estaba marcada como de velocidad controlada desde que comenzamos a rodar sobre Av. Vallarta el pelotón comenzó a acelerar.
En competencia
Desde este punto el pelotón comenzó a fracturarse y los que tenían un ritmo de pedaleo más elevado nos fueron dejando relegados, la emoción me llevó a que yo también elevara bastante el ritmo de pedaleo, lo que hizo que tuviera por momentos una velocidad promedio arriba de 45 Km/h, me sentía bastante bien, disfrutando del momento pero llegaron una serie de puentes sobre Lázaro Cárdenas que fueron desgastando mis piernas al seguir apretando el pedaleo para no disminuir el ritmo, algunos ciclistas me dejaron, otros me decían vámonos pero por un momento tuve que ir un poco más lento.
Pasarían un par de kilómetros así cuando al fin llegué a la zona del Alamo la que marcaba el regreso, quedaban 10 kilómetros para cubrir la primer vuelta, y fue cuando sentí que la energía regresaba a mi cuerpo, un grupo de unos 10 ciclistas me alcanzaron y me fui con ellos. Probablemente estaría con este grupo alrededor de 8 kilómetros cuando en la última subida baje un poco el ritmo y perdí contacto.
Comencé a sentirme un poco mareado por el esfuerzo, en estos momentos pensé que solo rodaría medio fondo. Al pasar por La Gran Plaza la meta estaba a unos cuantos metros adelante, así que apreté el ritmo para llegar lo mejor posible. Llegué a la meta y me sentí bastante contento, había hecho un tiempo regular de 2:21 hrs, ¡nada mal! aunque sin duda podemos mejorarlo y con mucho.
Esperando la salida a la segunda vuelta
Al pasar la meta a los de medio fondo les indicaron que dieran vuelta a la derecha y a los de gran fondo a la izquierda, decidí seguir la ruta hacia el gran fondo, iba a hidratarme un poco y ver cómo me sentía. Eran aproximadamente las 10:22 hrs, había bastantes personas hidratándose, hice lo propio. Me recuperé bastante, lo que hizo que decidiera que íbamos por los segundos 70. Mi esposa se acercó a donde estábamos esperando y estuvimos platicando un buen rato, la salida para la siguiente vuelta fue dada hasta las 11hrs, estuve parado cerca de 40 minutos.
Si bien me ayudó a recuperarme me enfríe de las piernas, lo que sin duda no fue tan bueno. Creo que debimos de haber salido a los 20 minutos a lo mucho. Sin embargo era necesario esperar a que llegaran la mayoría de los que habían hecho el medio fondo. Al fin nos indicaron que nos acomodáramos para darnos el banderazo de salida.
Segunda vuelta
Durante la segunda vuelta me encontré a un par de colegas con los que me fui pedaleando, al ya ser un grupo mucho más pequeño el ritmo fue mayor comparado con la primer vuelta. Comencé a sentir fatiga en mi cuerpo, pero iba junto con el pelotón. Al llegar a periférico sur, aquí fue donde comencé a rezagarme un poco, si bien no era una distancia alarmante, alrededor de 100 metros, pero ya iba un poco rezagado. Me hidraté lo mejor que pude así como comí todo lo que tenía a la mano.
Mi cuerpo aquejaba fatiga pero sobre todo una baja en la energía importante. Al llegar a Vallarta ya no me fue posible alcanzar al pelotón, arrancaron a tope. Poco a poco recuperé energía, así que fui viendo como se acumulaban los kilómetros y ya llevaba 120, la meta estaba muy cercana, algunos ciclistas me pasaban a otros los pasaba y así íbamos. Hubo un momento en el que iba en un grupo de 5 y una camioneta pasó a nuestra izquierda y dijo cúbranse del viento, y vi como una chica iba atrás de la camioneta los otros cuatro se le unieron y creo que aquí fue lo que marcó el desenlace final de mi competencia.
Devorado por la barredora
Traté de irme atrás de la camioneta pero me tardé una fracción de segundo en reaccionar, al ir yo a la extrema derecha ya no alcancé a unirme al grupo y me dejaron atrás. Solo vi como se fueron separando, apreté el pedaleo lo más que pude pero ya no era posible ir con ellos; así que relajé las piernas y seguí con mi trabajo a un ritmo que me permitía avanzar de la mejor manera posible.
Eran las 13 hrs, ya tenía 2 hrs de haber salido a la segunda vuelta y no iba tan mal, al menos eso era lo que yo pensaba. Estaba en el kilómetro 125, restaban 15, que si bien tenían algunas subidas y bajadas por el efecto de los puentes no eran de un gran grado de dificultad, aquí fue cuando vi que era totalmente posible alcanzar la meta alrededor de las 13:30-13:45
Fue entonces que surgió lo más temido, a mi derecha se me acercó una camioneta con un remolque y me dijo -ya no puede seguir tiene que pararse, darnos la bicicleta y subirse al camión- me quedé pasmado, eran las 13:05 hrs e iba en el kilómetro 127. Todos los anuncios decían que las vialidades estarían cerradas de las 7 hrs a las 14 hrs, no entendía la razón. Simplemente tenían urgencia de levantar a todos los ciclistas rezagados para abrir las vialidades.
De muy mala manera me detuve y les di la bicicleta, esperando que no se fuera a dañar allí en el remolque dado que las llevaban todas aventadas y me subí al autobús. Al final a escasos 500 metros de la meta nos bajaron y nos dieron las bicicletas porque la mayoría quería «consolarse» y llegar pedaleando a la meta. A mi me parecía una forma muy conformista y mediocre. Hicimos alrededor de 50 minutos para llegar a la meta desde que me recogió la barredora. Mi molestia era enorme, pasé por un poco de agua, la medalla y un bolsa en la que venía un plátano y un par de galletas.
Despidiéndome del giro
Ya en casa decidí revisar la convocatoria para ver la razón por la que me había devorado la barredora y entendí un poco, dice que debemos de cubrir la ruta en un máximo de 5 hrs, de 8 a 13 hrs, pero aquí es dónde me parece que era simplemente imposible terminar antes de las 13 hrs si la segunda vuelta la iniciamos a las 11hrs. Mientras iba de regreso en el autobús a las 13:30 pude ver que Lázaro Cárdenas ya tenía flujo vehicular. Sé que lo hacen por la seguridad de uno, pero me parece que fue un error en la organización.
Sin duda que me hizo falta llegar con una mejor preparación, de haber seguido con un mejor ritmo no me hubieran alcanzado y no me habría enterado de la situación. Fue una buena experiencia el pedalear con 600 ciclistas, un buen entrenamiento para el GFNY Cozumel.
Hay aspectos a mejorar como en todo, sobre todo el hecho de que las motocicletas de vialidad vayan rebasando a los ciclistas por la izquierda en calles angostas, con la prisa de pasar el contingente para tapar las bocacalles que estaban más adelante, en todo momento pudo ocurrir que una motocicleta le pegara a un ciclista y ocasionara una caída. Incluso hubo momentos que iban motocicletas a ambos lados del pelotón.
Esta fue la segunda edición del Gran Giro Guadalajara, ya veremos sin dentro de un año dejo este mal sabor de boca y me animo a participar…
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Juan ruvalcaba
Exelente historia muchas gracias